Cannabis y el sistema cardiovascular

El sistema cardiovascular humano es el sistema de transporte de nuestra sangre y el transportador de oxígeno, nutrientes, y desechos hacia y desde nuestras células. También actúa como una red de comunicación entre los órganos, la cual permite que las hormonas viajena los órganos del cuerpo a través de sus vías.Sin este, nuestro cuerpo no obtendría el combustible necesario para funcionar, los sistemas respiratorio y digestivo no funcionarían, y la homeostasis del cuerpo fallaría.Por estas razones, es esencial entender cómo el cannabis, al igual que los medicamentos, puede afectareste sistema, necesario para la supervivencia del cuerpo humano.

El sistema cardiovascular puede analizarse desde dos perspectivas; lo que se transporta desde el corazón y los pulmones a las células de nuestro cuerpo, así como lo que se extrae desde nuestrascélulas y se transporta de vuelta al corazón y a los pulmones.

En la circulación pulmonar, la sangre desoxigenada de los órganos y los tejidos transporta los desechos que generan nuestras células y es transportada desde el corazón a los pulmones, donde elimina el dióxido de carbonoantes de volver a recolectar oxígeno y posteriormente regresar al corazón.Posteriormente, es bombeada de vuelta a la circulación sistémica, donde esta sangre oxigenada puede llegar anuestras células y brindarles el oxígeno que necesitan y a la vez volver a recolectar sus desechos.

Si bien hemos comenzado a estudiar algunos de los impactos que el cannabis tiene en la circulación, se necesitan más estudios humanos para recopilar información más detallada.Los estudios actuales han obtenido resultados opuestos respecto a los efectos de la planta en el corazón y los pulmones de perros y ratones en comparación con los humanos. Esto nos dificulta estudiar cómo el cannabis afecta nuestro corazón y circulación, ya que ahora sabemos que los ensayos en animales podrían resultar ser irrelevantes al momento de comprender los efectos en el organismo humano.

El impacto del cannabis en el sistema cardiovascular depende de los porcentajes de cannabinoides presentes en la cepa que se consuma. Se ha descubierto que las cepas con alto contenido de THC aceleran el ritmo cardiaco, mientras que aquellas con alto contenido de CBD podrían disminuirlo . El CBD aparentemente actúa como equilibrador del THC—lo contrario también podría ser cierto—y pareciera quemuchos efectos son producidos por los dos en conjunto.

Como el THC puede aumentar el ritmo cardiaco, muchísimos médicos, inclusouno que obtuvo una patente para compuestos derivados del cannabis, creen que puede ayudar a tratar las enfermedades cardiacas. Al activar receptores específicos que le envían una señal al corazón para que bombee más rápido, la sangre del paciente circula con mayor rapidez y eficiencia. Evidentemente, esto debe estudiarse más, pero la combinación correcta de THC y CBD tiene ávidos adeptos respecto a la salud cardiaca, sobre todo entre deportistas que la consumen para ayudar a aumentar su energía y concentración antes de entrenar o competir.

Se ha descubierto que el THC relaja los músculos que rodean las paredes de las arterias, por lo que disminuye la presión arterial y aumenta el flujo de sangre a los tejidos.Por lo tanto, aunque puede contribuir a un mayor ritmo cardiaco, también relaja las vías a las que bombea , lo que podría permitir una mayor perfusión de sangre a los tejidos.Esto está impulsando a los científicos a realizar más estudios sobre cómo el cannabis podría disminuir lahipertensión.Los hallazgos actuales demuestran que los resultados dependen mucho de la dosis y de la cantidad de cannabinoides.

Si piensas consumir cannabis y tienes algún problema médico relacionado con el sistema cardiovascular, te recomendamos que hables con tu médico antes de consumir cualquier producto derivado del cannabis. Si bien se ha demostrado que la planta tiene cualidades terapéuticas para algunos trastornos cardiacos y circulatorios,podría no ser beneficioso para todos, sobre todo ya que nuestro conocimiento sobre sus efectos es bastante limitado por el momento. Para algunos, el simple hecho de consumir un poco más sobre el nivel de tolerancia general puede aumentar el ritmocardiaco y podría inducir la paranoia en algunos casos, dos efectos que nunca son una buena combinación.